Cuba.-
Déjame demostrar que diez noviembres, purifican el alma y el deseo, que al abrazarte aún mi cuerpo tiemble, y relajado, en paz, me duerma luego… «Comienzo y final de una verde mañana» es la letra de una canción del icónico Pablo Milanés, que ni que lo hubiera predicho, nos abandonará de la vida física el 22 de noviembre del 2022, a los 79 años.
Con tan solo 22 años formó parte del movimiento de la Nueva Trova Cubana, con la colaboración de otros cantautores cubanos, que condujeron el legendario y fundacional movimiento artístico, que renueva la canción de su tiempo, la poesía y el compromiso con la nación, actualiza formas tradicionales, enriquecido del sentimiento poético trovadoresco.
Fue fundador también el Grupo de Experimentación Sonora (GESI) del Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC), creado en 1969, siendo la banda sonora de la realización cinematográfica de la naciente Revolución, contribuyó al enriquecimiento del universo musical, espiritual y la conciencia social.
Sus temas musicales que degustan del son y la rumba como incursión de melodías, también se mueven en el filin, el bolero o el jazz, su extensa obra cuenta con más de 40 canciones que reflejan la mixtura de la cultura cubana y que le valió reconocimientos internacionales, como dos premios Grammy Latinos en 2006, y uno a la Excelencia Musical, en 2015.
Ha sido interpretadas sus canciones en conciertos y grabadas por artistas como Silvio Rodríguez (Cuba), Joaquín Sabina (España), Soledad Bravo (Venezuela), Simone (Brasil), Tania Libertad (Perú), Manuel Mijares (México), así como Ana Belén, Víctor Manuel, Amaya Uranga, Caco Senante, Joan Manuel Serrat, Miguel Ríos, en España, dejó lazos y afinidades musicales con Chico Buarque y Milton Nascimento.





